¿Qué son las obsesiones?
Para que un pensamiento se considere obsesivo debe cumplir una serie de características. La primera característica es que el pensamiento debe aparecer de forma constante y repetida en la mente de la persona (las ideas deben ser repetitivas y recurrentes). Además, por mucho que la persona intente no pensar en ellas o quitárselas de la cabeza, las ideas vuelven a la mente e incluso con más fuerza (surgen de forma involuntaria e incontrolable).
Normalmente las obsesiones aparecen en estados de ansiedad y de estrés psicológico y al aparecer lo empeoran formando un círculo vicioso.
A diferencia de las preocupaciones, las obsesiones suelen ser más intensas, frecuentes y duraderas y provocan un mayor malestar a la persona que las padece. Además, en las obsesiones no existe sensación de control sobre ellas o esta sensación es muy pequeña.
Las obsesiones pueden cronificarse y derivar en un trastorno obsesivo (pueden llegar a tener una base no racional o lógica) u obsesivo-compulsivo (cuando aparecen actos compulsivos para reducir el malestar). Además interfieren notablemente en el día a día de la persona que las sufre.

Obsesiones frecuentes
Algunas ideas obsesivas frecuentes son:
la obsesión por el orden y la organización
Obsesiones sobre miedos en el hogar (como cerrar la puerta de la casa, dejar luces encendidas, el gas abierto, etc.)
Obsesiones acerca de la limpieza y las enfermedades
Obsesiones respecto a correr algún peligro físico
Obsesiones sobre la imagen corporal
Obsesiones de naturaleza sexual
Si las obsesiones y pensamientos recurrentes están interfiriendo notablemente en tu día a día en el Centro Psicólogos Princesa 81 podemos ayudarte.