María de la Cruz Salazar

Hacía mucho tiempo que no me lo pasaba tan bien aprendiendo en un curso que se desarrolla en mi tiempo libre del fin de semana.

El contenido del curso ha sido muy dinámico, ha refrescado y actualizado información, aportando experiencias reales que soportan información actualizada del abordaje terapéutico en crisis. Uno de sus puntos fuertes es que enseña a todos los participantes la importancia del abordaje global de equipo y soporta la idea de apoyarse en la heterogeneidad del mismo. Ojalá siempre fuera así, que los cursos facilitasen encuadres respetuosos que promocionan la dinámica grupal de servicios heterogéneos en emergencias, respetando el dolor de las personas necesitadas de la intención. Son frecuentes las actividades grupales, poniendo en evidencia la dificultad de la tarea y facilitando herramientas de afrontamiento para intervención en crisis.

Como mejora, sugiero un intercambio de horas de las ponencias. Intentaría utilizar los dos días para las dos ponencias: una mañana uno y la tarde del día siguiente y viceversa. El objetivo de no presentar un día un abordaje y al día siguiente el otro sería proporcionar al asistente la oportunidad de traer preguntas al día siguiente sobre lo aprendido/abordado el día anterior.

Sin embargo ambas presentaciones me han parecido muy estimulantes y te dejan con ganas de profundizar.